En la posguerra, la situación para llenar el estomago no era tan terrible y acuciante como en las ciudades donde se encontraban instalados en la sociedad los comederos para pobres y las cartillas de racionamiento. En el mundo rural, para mal o para bien, uno siempre tenia unas verduras en la huerta o lograba coger con "nocturnidad" una liebre o una trucha.
Los desayunos en los pueblos (en torno a las 7 de la mañana) consistían en sopas de ajo o de leche, migas, gachas, patatas en sartén, leche de cabra (hervida previamente para evitar las llamadas "fiebres maltas" o brucelosis) etc...
Para almorzar (en torno a las 11), lo mismo que en el desayuno, aunque en verano se comían bocadillos de escabeche, de chicharro, sardinas en aceite, arenques...
Para almorzar (en torno a las 11), lo mismo que en el desayuno, aunque en verano se comían bocadillos de escabeche, de chicharro, sardinas en aceite, arenques...
Fuente de la fotografía: Concha Gonzalo Carrera
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